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• El itinerario recorre gran parte del piso Termo-Mesomediterráneo de La Costa. Nos familiarizaremos con la flora de bosques mediterráneos térmicos de Pino carrasco y Alcornoque con sotobosque de lentiscos, palmitos, jaras, aladierno,etc.

Llevaba mucho tiempo queriendo acercarme a mi querido Motril, para visitar uno de los espacios forestales mejor conservados y más accesibles de la provincia de Granada. Ha sido gracias a mi buen amigo y profesor, Antonio García Maldonado, que me ha sido posible disfrutar de un hermoso día de senderismo con "rally" fotográfico incluido. Nos citamos al pie del Cerro de la Virgen de La Cabeza, lugar emblemático de Motril. Como llegué con tiempo, me adentré en el primer bar de Motril que encontré, me gusta desayunar y leer la prensa del lugar, pensé que era una buena idea ponerse un poco al día en las páginas locales de nuestro periódico regional IDEAL. Me encontré con la noticia de que se va ha impedir una alteración sustancial del entorno del Palacete de los Vates y me pareció bien que se evitara el demadre urbanístico que se iba ha imponer en esta bello paraje agrícola de Motril conocido como Mirasierra (si no recuerdo mal). Según un Motrileño de "pro" que lleva viviendo muchos años en la capital, se quejaba de que en Motril no sabían qué significaba Vate y que invariablemente siempre se lo ha encontrado escrito don B... "debe ser otra deformación aberrante de nuestro idioma, ya que Vate en español significa: poeta, trovador, coplista, romancero...entre otras muchas acepciones". Y creo que tiene mucha razón, dado el lugar dónde se ubica me parece que esta explicación del origen del nombre es el correcto, así que lo he escrito con V.

Hecha esta disgresión motrileña, continuaremos con la secuencia relato. Tomamos la salida hacia el Puntalón y tomamos el desvío hacia Lújar y cerca de nuestro objetivo pasamos cerca de la estación de radar militar del Conjuro y a los pocos kilómetros se llega a un collado con unas magníficas panorámicas hacia el Oeste y Este, en este punto se sitúan unas estaciones de telecomunicaciones, al lado de las cuales estacionamos el coche, altitud 709 msnm. Desde este lugar sale un camino de tierra que es el que nos va conducir al Cortijo de las Piedras. Durante este trayecto es posible observar los primeros Alcornoques (Quercus suber), acompañado de varios tipos de Jaras, Enebros, Lavandas, Cantuesos, Lentiscos y una larga lista de plantas típicas de los bosques mediterráneos de Quercíneas (Alcornoques, encinas, coscojas, quejigos) y en especial del piso termomediterráneo subhúmedo, es decir con temperatura media anual de 16-18 ºC y una pluviometría de 600-1000 mm/año. A pesar de que estamos en una época poco agradecida para la observación de la flora, es increíble la cantidad de plantas que están comenzando a florecer. Es evidente la acción moderadora del mar que se encuentra a sólo unos 6 kilómetros de distancia. Este es uno de los bosques, en este caso un Alcornocal adehesado, cuyo estado de conservación, a pesar del cese de la actividad del corcho, es muy buena. Es fácil constatar este punto por la gran cantidad de arbustos y plantas trepadoras que pueden observarse en este espacio verde. En dónde los Alcornoques se encuentran en retroceso o bien como resultado del abandono de la dehesa, es muy frecuente ver la presencia del Pino Carrasco (Pinus halepensis). Es curioso observar como se intercalan estos pinos entre los Alcornoques, lo que confiere al paisaje un maravilloso contraste de verdes, que no puede dejar indiferente al aficionado a la fotografía. La madurez (50 años o más), disposición y cantidad de los pinos, nos indican, probablemente, un cambio de criterio en la explotación forestal

La presencia de arbustos como el Lentisco (Pistacia lentiscus), Enebro de Miera (Juniperus oxycedrus), Coscoja (Quercus coccifera), Acebuche (Olea europaea var. sylvestris), Arbutus unedo (Madroño), nos indican la presencia de un "Encinar térmico" en excelentes condiciones de conservación, de forma más explícita sólo podría expresarlo así: "De libro". La variabilidad de este "complejo", es tan ingente, que incluso incluye plantas como al Bufalaga marina (Thymelaea hirsuta), cuyo hábitat es cláramente costero. Asómbrense por que lo podemos encontrar a casi 1000 msnm, en este enclave, una circunstancia única en esta planta.

Pero si los arbustos son bioindicadores del tipo tipo de bosque en el que nos encontramos, las plantas trepadoras, son aún más específicas y difíciles de encontrar en ecosistemas degradados. Afortunadamente, otro signo más de el magnífico estado de conservación, es la enorme presencia de estas "lianas", tales como: Zarzaparrilla (Smilax aspera), Candilicos (Aristolaquia baetica), Rubia (Rubia peregrina), Falsa nueza (Tamus communis) y por supuesto la Madreselva (Lonicera implexa).

Una visita obligada es el Cortijo de las Piedras, quizás la construcción rural más grande del entorno. Está ubicado en una posición soleada y estratégica, desde la que se puede contemplar gran parte del alcornocal y los caminos y veredas de comunicación con Lújar, Jolúcar y otros cortijos de la zona. Se trata evidentemente de una hacienda destinada a la explotación agrícola y forestal de la propiedad. Aún se conservan, penosamente, algunos edificios. Antonio me va comentando el uso de cada una de las dependencias y me llama la atención, sobre la maquinaria y utillajes que todavía resisten la intemperie y el paso de los años. Las construcciones de este complejo se distribuyen a partir de una zona ajardinada, en la que la casa del propietario ocupa la orientación hacia el Oeste, es decir, la más expuesta a la insolación. Cabe destacar la presencia de agua corriente y la existencia de lavabos, por lo que el abandono debió producirse no hace más de 2 ó 3 décadas.

Una vez visitadas estas ruinas, Antonio me recomendó realizar un breve recorrido por una vereda, que partiendo del aljibe del Cortijo de las Piedras, bordea la falda de la loma, hasta llegar a una pequeña mina de agua, cercana a un barranco. La minería o realización de galerías, es una de las técnicas más antiguas utilizadas en la captación de aguas subsuperficiales. Este método de explotación de acuíferos es muy característico de áreas pizarrosas o esquistosas y muy frecuente en la Contraviesa y de todos los pequeños cortijos que jalonan las lomas entre Castell del Ferro y Rubite, por poner un ejemplo. El camino discurre al abrigo de Alcornoques, Pinos Carrascos de más de 100 años y está acompañado con un abundante sotobosque y estrato de lianas. Es un entorno también muy bien preservado y que por razones de "agenda", no tuve la posibilidad de visitar en más profundidad. En medio de la vereda, encontramos Níscalos y otro tipo de setas en pleno Enero, algo excepcional y que nos indican las condiciones de humedad del entorno. La luz que se filtra es tamizada por la abundante vegetación, ya descrita, lo que hace un lugar muy agrable de paseo, sobre todo durante los meses estivales. Lo dicho un lugar para investigar en más profundidad y que seguro debe deparar muchas sorpresas botánicas y zoológicas.

Deshicimos el camino recorrido por esta fantástica vereda y saliendo desde el Cortijo de las Piedras hacia el Norte, nos encaminamos hacia el siguiente objetivo: El Cortijo de Melero. A medio camino es posible cruzar un par de barrancos, uno de ellos con presencia de vegetación riparia, como por ejemplo, el Sauce. Y aquí me esperaba otra de las sorpresas del día, un pequeño Castañar (Castanea sativa) y en pleno ¿Otoño?...con gran parte de sus hojas aún por caer. Sin lugar a dudas estos deben ser los castaños situados más al Sur de la Península Ibérica y probablemente de Europa. Al pie de los castaños es posible contemplar una alberca, aún funcional, a pesar de su antigüedad. Remontando este barranco, es posible llegar hasta una pequeña surgencia que debe proporcionar agua durante todo o gran parte del año, otro dato interesante a investigar. Después de hacer unas cuantas fotografías, seguimos senda y llegamos al Cortijo de Melero, ya en el perímetro del Alcornocal. Aquí es posible observar una de las escasas explotaciones de agricultura tradicional, con pequeños huertos de verduras. Las áreas de transición entre el arcornocal y las agrícolas son zonas que deben investigarse a fondo. Estas áreas de transición presentan la mayor diversidad ecológica, al representar los límites entre ecosistemas. Especialmente en entre la especies de matorrales y herbáceas (alguno de ellos como la Lavandula multifida, un perfecto bioindicador del piso termomediterráneo), me fue fácil identificar algunas de las especies en floración como:

Lavanda (Lavandula multifida)

Cantueso (Lavandula stoechas)

Clavelinas (Dianthus malacitanus)

Romero (Rosmarinus officinalis)

Vinagreras (Oxalis pes-caprae)

Desde el Cortijo de Melero, continúa el camino, a veces senda, que ha de llevarnos a Lújar. Durante el mismo es posible contemplar un buen número de mariposas y entre estas la más bella de todas, el arlequín de las aristolaquias. Antonio con su super-macro, creo que hizo buenas tomas de "La limonera" y "Arlequín", yo me fui con las manos vacías, pero bueno, más adelante me resarcí, como veréis. El caso es que a unos 300 m del Cortijo de Melero, se cruza en el camino la Rambla de Lújar y este es un sitio muy interesante geológicamente, porque es el límite entre el Manto de Murtas (principalmente silíceo: esquistos y filitas) y el del Escalate (principalmente calcáreo: dolomías, mármoles y calcoesquistos). Esto se hace más patente cuando cruzamos al otro lado de la Rambla de Lújar y comenzamos a observar plantas típicamente de suelo calizo y en especial arbustos como el Bayón (Osyris quatripartita) y el Oroval (Withania frutescens), excelentes bioindicadores del piso bioclimático termomideterráneo.

Una vez se alcanza la carretera general en las afueras de Lújar, sólo hay que cruzarla para continuar con el sendero que conduce a Lagos. Ddesde que abandonamos el Cortijo de Melero, se encuentra empedrado y con una anchura de unos 3 metros de media. Este empedrado prosigue hasta aproximadamente 2 km depués de pasado Lújar. Curiosamente coincide con el tramo que discurre por terreno calizo, que es el único que observaremos en este recorrido. Como el camino posee una pendiente sostenida y el calor aprieta, de vez encuando probamos suerte con alguna de las mariposas que se nos cruzan y en una de estas localicé una pareja de Colias crocea. Antonio se puso manos a la obra persiguiendo a ambos ejemplares y tuvo la amabilidad de cansarmelos para que pudiera "retratarlos" con mi camarita, por lo cual le quedo eternamente agradecido. De esta forma y poco a poco, logramos llegar al paraje conocido como " Fuente de la Higuera", y nos encontramos con unos campesinos que estaban recogiendo aceituna. Les preguntamos si era verdad que por allí había agua y la respuesta fue afirmativa, indicándonos que fuéramos a un huertecillo que había unos metros más arriba. Aquí hicimos "parada y fonda", nos zampamos nuestros bocadillos y frutas. En estas que veo a Antonio otra vez cámara en ristre y lo veo persiguiendo a un Sírfido (son como avispas o abejas, pero con ojos de mosca) en una Lechetrezna (Euphorbia nicaeensis). Trabajando en equipo, nos pusimos cada uno en un extremo de la planta e hicimos las fotos del "bicho". Después de esto nos fuimos a retomar nuestro camino, el sendero de Lagos. Como la cuesta continuaba seguimos haciendo fotos durante la ascensión y pude fotografiar la primera Violeta de la temporada (Viola arborescens) y el arbusto Hediondo (Anagyris foetida), que se ha hecho famoso recientemente, por ser la primera planta europea que es polinizada por aves, más información en: http://www.unex.es/unex/servicios/comunicacion/archivo/2005/092005/21092005/art2. al cabo de un buen rato llegamos al collado que une la Sierra del Jaral y la de Lújar. Desde esta privilegiada situación es posible ascender sin esfuerzo al Cerro Alto.

Desde Cerro Alto, es posible contemplar una magnífica panorámica de Lagos y todo la Vega de Motril, al Oeste se distinguen perfectamente las sierras de Cázulas y Almijara, al Norte podemos ver en toda su extensión la Sierra de Lújar y conforme desplacemos la vista hacia el Este, veremos la Sierra de la Contraviesa, La Haza del Lino (el alcornocal más cercano y el más alto de España y posiblemente de Europa), Lújar y Castell del Ferro. En fin que deciros de este vértice montañoso que separa los términos municipales de Motril, Lújar y Vélez de Benaudalla, que es maravilloso para contemplar una puesta de sol única en la Costa Tropical. Si forzamos la vista, es fácil ver la Punta de la Mona, La bahía de Málaga y ...al fondo creí distinguir la Sierra de las Nieves que separa las provincias de Málaga y Cádiz. Ahí va un pequeño reportaje de lo que puede observarse...un día cualquiera.

Como ya la luz nos abandonaba tomamos el cortafuegos como camino de regreso y aproveché para contemplar de cerca un parque eólico, que siempre había visto como algo lejano. Es evidente el impacto visual que produce y el riesgo que genera sobre la avifauna del arcolnocal. Como positivo, a parte de la producción de energía limpia, destacar la poca ocupación de suelo y el que por una vez vamos a tener un cortafuegos bien limpio y accesible para los medios de extinción terrestre. Como estaban por allí algunos técnicos, Antonio se dedicó a hacer "proselitismo" del Alcornocal,les enseñamos el Libro del Alcornocal y quedaron maravillados. Piensan ir a la Concejalía de medio Ambiente de Motril a pedir unos cuantos libros o lo que es lo mismo a que los "claven"...en fin, parece ser que la Divulgación Medioambiental tiene un precio y este es económico. Claro que alguien podría editarlo en Pdf y socializar el conocimiento de verdad, no de "boquilla". Aún no entiendo como la Concejalia de Medioambiente del Ayuntamiento de Motril no se ha planteado, junto con el de Lújar, solicitar la declaración de (como mínimo) de Arboleda Singular. Lo dicho lamentable que se pierdan las inversiones en zonas con un valor ecológico ínfimo, de repoblaciones del tiempo del "Caudillo", o en minas peligrosas e invendibles, como del Cerro del Toro. ¿No se dan cuenta de la importancia y singularidad de este bosque Relíctico y de la masa forestal de la Sierra del Jaral?, A ¿qué esperan?. Vamos a ver si es posible que de una vez por todas se tengan unos criterios de conservación medioambiental basados en datos objetivos de diversidad y calidad ecológica de los ecosistemas a proteger. Digánme un solo espacio medioambiental del municipio de Motril mejor que este para protegerlo.

Y con estas profundas reflexiones acababó el día junto a mi amigo Antonio. No se como poder expresarle todo mi agradecimiento por su dedicación exclusiva, por su excelente guía y por lo que me ha enseñado gustosamente y cómo no, por su calidad personal. Habrá que protegerlo...estos "bichos", también están en vías de extinción.